Caldas das Taipas - Caldelas

A tan solo 7 kilómetros de Guimarães en dirección a Braga está la parroquia de Caldelas que es conocida como Caldas das Taipas por su actividad termal que viene desde tiempos romanos.
En 1940 pasó de ser aldea para convertirse en Villa por real decreto.
Sus aguas medicinales eran utilizadas por los romanos y de ello hay bastantes restos que han llegado hasta el día de hoy como el Ara de Trajano que podemos ver al lado de la iglesia también conocida como el "Penedo de Trajano", Penedo da Moura o Ara de Nerva. Es una gran piedra granítica con una inscripción en latín dedicada al emperador romano. Está clasificada como Momumento Nacional.

Al lado se encuentra la Igreja Matriz que fue inaugurada en 1915 de planta moderna y otro templo cristiano es la Igreja Velha del siglo XVII dedicada a los santos Tomé y  Ovídeo.

A orillas del río Ave y con manantiales de agua medicinal era el lugar ideal para la instalación de los romanos y fueron encontrados vestigios de la existencia de unas termas donde se construiría el primer Balneario conocido como Banhos Velhos. Este espacio fue utilizado como zona de baño desde 1753 según consta en documentos escritos y debido a la gran afluencia de público, el ayuntamiento construyó la nueva Casa de Baños más cómoda y con mejores instalaciones en 1818 con el encañamiento de las aguas, que sería ampliada en 1843. Durante los trabajos de destierro y localización de nuevos manantiales fue cuando se encontraron las antiguas termas romanas. En 1867 se procede a nuevas captaciones y en 1875 se inaugura un nuevo pabellón con 10 bañeras de azulejo y vestuarios.

Foto: Turismo Guimarães

Seguirían en activo hasta 1977 que Sanidad ordena su cierre por filtraciones tóxicas que contaminaban los manantiales. Luego entraría en un estado de abandono hasta su rehabilitación en el año 2010 para transformarlo en un espacio cultural y musical con amplia programación durante la primavera y el verano.

Con el descubrimiento de nuevos manantiales y la necesidad de unas nuevas instalaciones para acoger a la gran afluencia de público, en 1918 se construye a unos 100 metros el nuevo Balneario conocido como Banhos Novos, en cuyas obras también se encontraron estructuras romanas, quedando así en antiguo balneario como de segunda categoría. Se modificaría en 1939 conservando su estructura. La última rehabilitación sería en el año 2015 con ampliación de instalaciones y jardines.

Las nuevas instalaciones termales cuentan con un edificio de inspiración neoclásica contando con aguas únicas en el país capaces de tratar las afecciones crónicas del aparato respiratorio, dolencias de piel, rinitis, faringitis, asma, bronquitis, gastritis y dolencias crónicas del aparato digestivo. Recomendadas para reumatismos y artritis.

En su parte izquierda está situado el edificio del Hotel con grandes salones que conserva su traza clásica, seguido el moderno edificio del Spa Termal que ofrece variedad de circuitos dinámicos, sauna y solarium.

Completando el conjunto de edificios podemos ver la Clínica Médica de Saúde dedicada a tratamientos de fisioterapia y electroterapia bajo la dirección del Doctor António Cunha con modernos tratamientos de hidroterapia como rehabilitación en el agua.

En la entrada del edificio principal, en medio de un precioso jardín, podemos encontrar una fuente de aguas sulfurosas en un nivel inferior cuya fecha que figura en una inscripción es de 1907.

Pero el gran apogeo de la villa no solo se debe a su actividad termal, si no también a la fabricación de cubiertos, por ello también es conocida como la "Capital da Cutelaria" cuya actividad se desarrolla desde el siglo XVIII y que hoy en día fabrican elegantes cuberterías, navajas o tijeras que son exportadas a mas de 50 países. Algunas de esas empresas son: Dalper, Cutipol, Jomafe...

Cuenta con un Camping de 15000 metros cuadrados con capacidad para 234 personas que abre en época estival, varias piscinas al aire libre (siendo una de ellas de tamaño olímpico), instalaciones deportivas y un gran área recreativa a orillas del río Ave con playa fluvial

Otro vestigio de la época romana que podemos encontrar visitando la ciudad es el puente sobre el río Ave, Ponte das Taipas declarado Monumento Nacional desde 1926.

Y después de un gratificante paseo a la orilla del río nos podemos desplazar unos pocos kilómetros para visitar las estaciones arqueológicas del Castro de Sabroso y la Citânia de Briteiros, siendo un buen ejemplo de la presencia pre romana en la región.

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